Foto: Galeon |
Hoy es Semana Santa. Un pequeño que estrena túnica de
nazareno de La Borriquita, es vestido por su madre mientras que sus dos abuelos
preparan unas torrijas para el postre. Su padre saldrá un poco más tarde, en El
Amor.
Es Domingo de Ramos, 15:00h de la tarde y las puertas de El
Salvador se han abierto. Los mayores de edad portan túnica negra y son los
primeros en pisar la “rampla” por la que corrieron cuando eran niños, como el
pequeño que hoy estrena su túnica blanca.
Se puede ver un grupo de jóvenes riendo los cuales no
parecen prestar mucha atención, un grupo de niños disfrutan del momento
mientras piden sus primeras estampas junto con sus familias, un par de
“capillitas” terminando de planear el día y una mujer anciana expectante
mientras suenan las primeras campanas de La Borriquita. Son, diferentes maneras
de disfrutar de la Semana Santa.
Yo formo parte de ese par de “capillitas”, no me gusta
perderme ni un detalle y a todo aquello que puedo voy. Disfruto desde la cruz
de guía hasta para el que es para mí uno de los mayores placeres de la vida que
es el ver un palio marchar. Desde el olor a cera hasta el más aromático
incienso de las diferentes hermandades. Desde el olor a azahar del naranjo
hasta el olor del clavel, la rosa… de un paso. Desde el izquierdo de un paso de
misterio a la más elegante mecida de un palio al son de Amarguras mientras
suena el golpe de las bellotas en los varales.
Y por ello, porque forma parte de mi vida cotidiana y llevo
mucho tiempo alrededor de este mundo, es importante hacer una autocrítica. Uno
autocrítica que debe empezar por lo más profundo de las hermandades. No me
refiero a la caridad, tan ahora de moda y de la que presumen muchas juntas de
gobierno por su gran labor. Para mí, lo más profundo a lo he mencionado, son
las juntas de gobierno.
Hemos llegado a un punto en el que las juntas de gobierno se convierten en partidos políticos que intentan quedar por encima a cualquier costa, ya sea de otra hermandad o por encima de una junta que intenta ganar las elecciones en la misma hermandad, con el único objetivo de que se les vea.
Hemos llegado a un punto en el que las juntas de gobierno se convierten en partidos políticos que intentan quedar por encima a cualquier costa, ya sea de otra hermandad o por encima de una junta que intenta ganar las elecciones en la misma hermandad, con el único objetivo de que se les vea.
¿Dónde está aquí el sentido de la hermandad? Propias hermandades divididas
entre ellas, hermanos de ellas que no se hablan entre sí por tener opiniones
diferentes. ¿Alguien se acuerda por el verdadero motivo por el que existen las
hermandades? Se han ido cometiendo fallos, desde mi humilde opinión, desde que
en el libro de reglas de una hermandad existe la palabra “elecciones”. ¿Cómo no
quieres que te comparen con un partido político si la estructura que tienes es
similar? Aunque ahora preferiblemente me gustaría hablar también de otras
cosas.
Hay también otros problemas que para mí no son menos
importantes pero sí lo es darle un orden. El tema tratado anteriormente es más
bien interno, por lo que todo es muy bello de cara al exterior. Sin embargo,
cuando suceden problemas como convocar una rueda de prensa para emitir lo
tratado a cerca de los horarios de la “Madrugá” y cancelarla posteriormente
debido a que los hermanos mayores han decido no comunicar nada de momento deja
bastante que desear con respecto a ciertas normas de conducta.
Además de otros casos parecidos como entre La Lanzada y Los Panaderos. Una hermandad que interrumpe el
cortejo de la otra para huir de la lluvia dejando a la otra y mojándose ¿Dónde
está aquí el sentido de la caridad?
¿De qué te han servido X€ a Cáritas? Acabas de demostrar que no tienes sentido de la empatía realmente.
Foto: El Correo Web |
¿De qué te han servido X€ a Cáritas? Acabas de demostrar que no tienes sentido de la empatía realmente.
Otro tema que me preocupa es el de las bandas y los
costaleros. Procesiones que llevan más público grabando a una banda que delante
del paso.
Monumentos al costalero, porque sí, porque está de moda. Al parecer todo el cortejo de nazarenos, los ciriales y las diferentes personas que participan son prescindibles para algunas personas.
Monumentos al costalero, porque sí, porque está de moda. Al parecer todo el cortejo de nazarenos, los ciriales y las diferentes personas que participan son prescindibles para algunas personas.
Pero esta, como ya he dicho es mi manera de sentirlo y de
esa manera lo he querido plasmar en esta entrada.
Y como no, nada mejor para terminar, que ver un palio marchar.
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Esta entrada consiste en una actividad libre. En ella debemos hablar que algo que nos apasione, que nos guste, que nos haga sentir, describirnos, plasmar nuestros sentimientos... en definitiva una temática libre.
Foto: La pasión del costal. |
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Esta entrada consiste en una actividad libre. En ella debemos hablar que algo que nos apasione, que nos guste, que nos haga sentir, describirnos, plasmar nuestros sentimientos... en definitiva una temática libre.
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